miércoles, octubre 29, 2008

Los muertos de mi felicidad

Cuando cumplí 13 años moría por enamorarme de alguien, y bueno después de mi primer beso que fue en realidad algo chistoso y ni siquiera cercano a lo que yo había pensado o imaginado (recuerdo la pregunta de el otro partícipe de la historia muy preocupado ¿te gusto? Jajaja) a los 14 conseguí enamorarme de un platónico y lejano amor (turururu) y a los 15-16 de uno no tan platónico; en ese año mi corazón se rompió por primera vez después de intentar jugar a la niña grande y bueno…me levanté me aburri de estar triste y me busqué un trabajo de verano. El asunto es que de ahí a la fecha las cosas han cambiado considerablemente, mi corazón se ha roto varias veces desde entonces y también he colaborado en la ruptura y colapso de corazones ajenos por lo que me gane una fama de “destruye-viditas” tras de mis 25 años, yo la verdad que no lo veo así, creo que uno tiene que hacer lo que siente a pesar de todo, y sigo pensando igual después de tres años de eso ya.

Conozco personas que no han tenido nunca un EX o si acaso uno solo… (si es@s que se casaron con el primer novi@ o es@s que se niegan a tener una relación con alguien porque yo que sé porque), pues de esos hoy no hablaré, hablaré de esos que nos importa un cacahuate rompernos la maceta cada año por enamorarnos de la persona equivocada o por vivir lo que a uno le da la gana sin importar las consecuencias porque “si que compensa a pesar de lo que venga al final”, a nosotros hemos sido EX de muchos y que tenemos EX detrás, historias que contar y de las que aprender (aja si claro) es de esos de los que quiero hablar.

Los EX nos dan dolores de cabeza, tristeza, recuerdos amargos y no tan amargos. Los hay “Ex From Hell” esos nos dan miedo y flojera. Los EX nos sorprenden constantemente con ausencias eternas y apariciones repentinas. En mi caso creo que soy una EX singular, salvo algunos (2) específicos casos en los que la ruptura fue muy dolorosa y terminé siendo total y absurdamente incomprendida y enterrada como historia innombrable (en ambas ocasiones el punto fatal se dio casi un año después de dada por terminada la relación), soy una EX amigable y perfectamente utilizable para ocasionar celos en las novias o queberes actuales de mis EX en cuestión, por eso además de ser la EX amiga también a veces soy confundida con la que “volverá alguna vez” pues no! No es cierto!! Para ser un EX una característica importante es ser superado en el ámbito amoroso, eso, es justo lo que hace la diferencia entre un EX o un EX From Hell, y un aferre a imposibles.

Si, alguien me dijo alguna vez que era enervante como en mi vida siempre había la sombra de un EX (from hell or not) que no dejaba atrás y que se aparecía constantemente para hacer mi vida miserable y con permiso mío además, hoy le puedo decir a ese alguien que al parecer lo he superado mjm. Bueno, la verdad que el ultimo en cuestión no ha vuelto a aparecer y la última vez que lo vi dejé clarísima mi falta de prudencia y poco entendimiento de los resentimientos humanos a largo plazo, cuando me acerqué a saludar contenta porque tenía meses de no verlo, recibí poco menos que eso que llaman la ley del hielo. Hoy agradezco su ausencia total pues acepto que su presencia me altera y mas con la ley del hielo incluida, Hoy confirmo la idea de que hay EXs que si debemos dejar atrás, si por algo se llaman así, yo misma he sabido que a veces hay que mantenerse lejos cuando la relación no es sana, eso claro que no es lo que me hace más feliz, pues tengo el “síndrome de madre teresa y el mundo es un lugar feliz“, en la mayoría de las ocasiones y además suelo querer mucho e interesarme por la vida de aquellos con los que me he involucrado y enamorado, porque creo que el vinculo que se da entre una pareja aún cuando ya no se amen, da una conexión que seria bueno poder mantener a pesar de que no sigan juntos.

A que va todo esto, pues a que hoy una amiga me comentó que a pesar de todo lo que yo creyera (recuerdan lo de incomprendida y enterrada como historia innombrable), no era odiada por uno de mis EX, me da gusto saberlo, al final los rencores no sirven de mucho y el papel de un EX es abrirnos una puerta a otras oportunidades, aprender y sufrir para dejar de hacerlo y tener más que dar a la persona que viene y no al revés. Yo paso las páginas de mi vida con cierta facilidad “no me clavo en la textura” dirían por ahí, pero esa soy yo y nací un día después de un eclipse solar… así que no espero lo mismo de los que me rodean, seguiré siendo un huracán para algunos y otros seguirán siendo huracanes personales, pero al final lo importante es no perder esa capacidad de ser el “Ahora” para alguien que uno quiera. Mi “ahora” llamó hace un momento para decir buenos días, y con eso tengo para pasar la semana entera… eso y el saber que tengo un karma menos que pagar me hicieron escribir esto hoy.

Soy feliz soy un hombre feliz y quiero que me perdonen por este día los muertos de mi felicidad.

1 comentario:

fgiucich dijo...

Un ensayo muy interesante acerca de la importancia de los/las EX en la vida de cada uno. Abrazos.